DISCURSO FILOSOFÍA...

LA MUJER COMO MOTIVO DE ALEGRÍA

POR: YESSIKA ALEJANDRA GUERRERO CRUZ.

La mujer es un ser indispensable en el mundo, pues sin ellas no podríamos vivir, son ellas el eje fundamental en nuestra vida desde que nacemos hasta que morimos, aunque nuestras madres sufren 9 (nueve) meses para tenernos y unos cuantos años más hasta que aprendamos a defendernos y a valernos por sí mismos.

En el colegio son nuestra mejor profesora, en el bachillerato nuestra mejor consejera y siempre serán nuestro ángel guardián, ellas siempre serán esa esencia que nos mueve a crear, escribir todo tipo de cosas, ellas han inspirado obras maestras, actos de amor y hasta desamor, historias de heroísmo, orgullo, alegría y odio. Así los grandes escritores han escrito toda clase de libros por su esplendor, e incluso se han declarado guerras solo por defenderlas y recuperarlas.

A veces vamos por la vida conociendo a muchas personas con diversos caracteres; algunas mujeres son muy serias y formales, otras son precavidas  no entregan fácilmente su confianza, algunas otras son aisladas, tristes, apagadas, sin fuerza y otras ni se les acerca uno porque siempre están a la defensiva listas para atacar.

Aunque gracias a DIOS hay mujeres muy alegres y divertidas que hacen de la vida algo inesperado, sobre todo porqué se han caracterizado por la ternura que llevan en su corazón. Mujeres con carisma, entusiasmo, optimismo, con ganas de bailar, cantar, reír, vivir y tener solución a los problemas o situaciones.

Por eso podemos decir que ser mujer significa ser transmisora, protectora, transformadora de la vida; ser alegría de la vida, incluso ser vida, amor y ser sabiduría.

Descubre la alegría de ser mujer, la alegría de ser tú, lo que vales como mujer y nuestro increíble potencial, porqué de una u otra forma las mujeres siempre se han destacado por ser una persona que lucha por sus ideales y por la gente que ama, no pasando por encima de los demás sino siempre buscando el bienestar de todos, tanto de los seres que aman y de los que nos rodean, ¡como ellas no van hacer tan comprensivas!, si ellas son nuestro motor de vida; nos han regalado la sencillez y el querer ayudar a los demás.

*La alegría continua es la prueba más clara de sabiduría. 

Esta es una de las frases más ciertas, la mujer es un signo e instrumento de sabiduría por eso se pude decir que la mujer es una base y confort de alegría para los demás, ellas nos transmiten este sentimiento u valor tan grande, por eso podemos decir que la mujer además de ser tan necesaria por el don más grande y bonito que es dar vida, también nos llenan la vida de alegría, cada vez que tenemos un problema, la mujer es la que nos brinda ese alivio y confianza, de saber que de una u otra forma todo se solucionara, ¿cómo?, eso es algo muy difícil de explicar, lo único que si tenemos claro es, esa valiosa función que cumplen nuestras madres ,abuelas ese tipo de sabiduría es la que las hacen ser tan valiosas y fundamentales para el ser humano. Un día en una actividad escolar una de nuestras directivas nos relató un texto del libro LA CULPA ES DE LA VACA  de Jaime Lopera y Marta Inés Bernal Trujillo, en la que nos habla acerca de las buenas o malas madres, es muy importante ya que esta dicha persona nos decía según el libro las malas madres son, aquellas que están ahí con uno, motivándolo de una u otra forma, que no te dan permiso para salir todo el tiempo, ni te deja hacer lo que quieras, que cuando tienes una fiesta tienes que decir de quién es, en donde vive, y con quién vive e incluso que ellos te recogen. Y el otro tipo, es las madre buenas, son esas madres que te permiten hacen lo que tú quieras, a la hora que quieras, y en donde quieras, que no se preocupan casi por lo que te pueda o no pasar, esta historia fue muy importante para nosotras las chicas y sobre todo en esta edad l adolescencia que es tan difícil y creemos que por tener tantos años, ya nos podemos mandar solas e incluso hacer lo que queramos y ver cómo nos hacía caer en cuenta, la importancia de tener según lo descrito por el libro , una “mala madre”, pero seamos realistas lo mejor de todo esto es que nosotras tenemos la oportunidad de algún día llegar hacer buena o mala madre. Y de llenar de alegría nuestra vida y la de los demás, debemos luchar por nuestros ideales por lo que queremos llegar hacer  de nosotras pero no pasar por encima de nuestros valores y lo que se nos ha inculcado desde pequeños.

En mi caso, se puede decir que yo tengo una de las madres más malas, aunque a esta edad no tenemos la capacidad de darle la razón a ellas de hecho, siempre tratamos de llevarle la contraria a ellas, solo por el hecho de creernos capaces de que ya podemos decidir qué hacer de nuestra vida y que ya podemos tomar decisiones que de una u otra forma van a afectar en nuestra vida pueda que no afecte mucho en este momento, pero más adelante la vida no lo cobrara.

Por eso solo me resta decirles que si algún día piensan en querer utilizar ese don tan grande y espectacular que DIOS nos dio, de dar vida y ser vida para los demás sigan siendo una “mala madre” según el contexto del libro ya propuesto anteriormente…

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YESSIKA  GUERRERO

ONCE-B